martes, 30 de octubre de 2012

La Castanyada



Las próximas entradas estarán muy marcadas por las fechas. En vez de tanto rollo con el Halloween, que es una tradición cuanto menos lejana, voy a explicaros que es lo típico de aquí (aquí entendido como Cataluña). Me ahorro los rollos de que la globalización mata las costumbres de los sitios y blablabla ya se sabe como van estas cosas. 

Aunque sea en menor medida, sobretodo focalizado en los colegios, lo típico es celebrar el 31 de octubre (o por lo menos esa semana) La CastanyadaNo vamos a hacer una entrada de Wikipedia sobre cuándo empezó y esas cosas, solo algo que a alguien que pudiera venir aquí le pudiera interesar saber. 

Edito la entrada debido a un error, por lo visto la festividad es más general de lo que yo conocía, pues mi experiencia, y la que es transmitiré se limita al ámbito catalán, que es lo que yo conozco, pero, y cito textualmente: "Se celebra en casi todo el norte peninsular, desde Portugal (Magusto), Cantabria, Castilla, País Vasco, Aragón y hasta el sur de Francia, sin olvidarnos de Galicia" No te acostarás sin saber algo nuevo, gracias Paola por completarlo.


En esta fiesta la principal protagonista es la castaña (nada de calabazas diabólicas). Tiene un origen sencillo: antes de que el calentamiento global (otro amigo del que no vamos a hablar) lo trastocara todo, en Octubre hacía MUCHO frío. Así que por la calle habían paradas de castañeras/os que vendían paperinas de castañas calentitas, cosa que era de agradecer. Y eso ha seguido así. Hoy en día siguen habiendo estas paradas en la calle, aunque de forma anecdótica. La estampa que puede verse hoy día no es tan entrañable pero sigue despertando ese sentimiento tan típico de cuando se ven fotos antiguas. Algo que sobrevive al paso del tiempo.



La celebración queda limitada al ambiente familiar o el colegio. Cuando vas a primaria, ese día es uno de los guays, porque lo único que haces es pintar castañas, castañeras y cantar canciones (si eres de los peques) o disfrazarte de castañera/o (sí, de viejecito con cestita, pelo canoso, ropa del monte y bastón a ser posible) y pasar por las clases de los peques para llenar sus paperinas de papel de periódico de ricas castañas. 

A mí, personalmente, no me gustan las castañas asadas, las prefiero crudas, pero para gustos colores. Pero no es la única integrante del grupo, pero sí la solista. Junto a estos frutos secos hay dos miembros más: los moniatos y los panellets. Los primeros son unos tubérculos  similares a las patatas, de gusto dulce y color anaranjado, que se toman asados. Muy buenos también para quitarse el frío.

Y los panellets. Si no te gustan ninguno de los dos, siempre te quedan ellos. Son una especie de pastelillos, pequeños, hechos con pasta de patatas y de muchos gustos: hay de chocolate, de almendras, de coco, de avellana... Es casi imposible que no haya uno que guste. 




Así que ya sabéis, podéis reuniros con la familia y/o amigos el día 1 (Tots Sants, aunque esa tradición sí que está bastante de capa caída), asar castañas y moniatos, y comerlos junto a una rica bandeja de panellets.

Os dejo la canción típica de La Castanyera, así podréis oír lo que cantamos en el colegio por las fechas.


Canción popular catalana

2 comentarios:

  1. A mis las castañas nunca me han gustado ni un poco, pero los panellets son un maldito vicio. Me acuerdo en primaria que el día de la castanyada se basaba en hacer panellets y enguarrarse la ropa a niveles imposibles de masa de panellet.

    Eso si, la gente que se queja de que hoy en día los niños y no tan niños prefieren halloween... ¿Qué parece más divertido, comer castañas o disfrazarte y conseguir chucherías gratis?

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  2. Esto me mola más. Incluso yo, que voy de listillo y de sabio por la vida reconozco que he aprendido algo leyendo la entrada. Y aprender es inportante. Es un puntazo que la entrada de wikipedia esté en rojo, y que el resto de la entrada no se le parezca en nada al resto de la entrada. Very good, I'm satisfied... for now. Supongo que la supremacía de Halloween se debe a que aparece mucho más en la tele que la Castanyada, y a que, en Halloween, el marrón se lo comen los que tienen que dar caramelos a los niños, y no los padres que luego tienen que hacer mil lavadoras... o comprar ropa nueva directamente.

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